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"Trazos del trece"

MOVILES SIN TILDES      

Escuchando silencios
en tiempos muertos
escribiendo mentiras
entre letras perdida
silbando ritmos oscuros
que no atraviesan el muro
melodias perdidas, aritmicas
que mueven los pasos de mi vida

Litros de cafeina
sol de invierno, extremoduro
sueños de heroina
frio que congela el mundo
viento que peina mis ideas
silencio que canta verdades
oidos desconfiados de años
escuchando todo lo que no saben

contrapunto contraido
subconscientes subnormales
tu llegas, yo ya me he ido
invencibles inocentes
moviles sin tildes
  


TANTA GENTE MINTIENDO          

Ahora se respirar sin abrir la boca
y así no me equivoco ni soy una loca
y es posible que exista otra forma
pero me he olvidado de decir las cosas

Mañana estaré perdida en el tiempo
condicionando mi alma en el silencio
confundida entre tanta gente mintiendo
extraña al sentir que te estoy perdiendo



AQUEL ARTE          

He renovado mi fondo de armario
No hay pantalones rotos ni cagados
Camisetas de mil colores
para debatirte las razones

Y puedo estar contenta sin reír
Y puedo aguantar mucho sin morir
Puedo cabrearme y ser paciente
Hago oídos sordos a la gente

Creo que hoy he evolucionado
Ya no me altero con tu cara de cardo
Se que el tiempo pondrá de su parte
Ya conseguiré encontrar aquel arte

El arte que un día me enamoró
Ese que juega con los sentimientos
El arte que toda tristeza borró
Ese que me delata cuando miento



REVENTAR TU CORAZÓN      

Hay otro tren que me espera
Es posible que allí ya no llueva
Hay otro monstruo que me asusta
Y tus palabras ya no me gustan

Puede que no me crean más
Y supongo que otra vez es mi culpa
Quizás tus sonrisas ya no existan
Y las mías las tiraste a la tumba

Rabia, Dolor
quiero reventar tu corazón
Lágrimas, sudor
voy a reventar tu corazón



LA MENTIRA ESCONDIDA    

La trama inexistente
de los juegos de mi mente
la estúpida salida
que nos ciega la alegría
la palabra nunca dicha
que nunca será mía
la mentira escondida
en los rincones de la vida

Todos los autobuses
despegan de la estación
y yo aquí perdida
no escucho tu canción



DEMASIADO POCO
  
Demasiada soledad mal acompañada,
Demasiado silencio en mi cabeza desordenada,
Demasiado frio en un cuerpo vacío,
Demasiada angustia en una mirada perdida.
Muy poca comprensión en unos ojos llorosos,
Muy poca ayuda a unos gritos sordos,
Muy poco apoyo en manos amigas.
Demasiado caos en una vida desordenada, 
Demasiadas palabras para no decir nada,
Demasiados gritos que no se escuchan,
Demasiadas palabras para no ser leídas.
Muy poco empeño por hacerlo llevadero,
Muy poca esperanza en una vida que se apaga,
Muy poco tiempo para perder perdonando.




            DE VUELTA AL INFIERNO
  
Estoy aquí, de vuelta al infierno; donde todos queríais verme. Nada importa el silencio corrompiendo mi libertad, las lágrimas escapando de algo de lo que yo no puedo escapar.

   Estoy aquí, haciéndoos felices a costa de mi. Nada importa tanto como yo pero todo es más importante que yo.

   Escribir siempre será lo último que me quede, lo único que me quede. Mientras tenga una palabra que gritar la susurraré al silencio de no ser escuchada.

   Estoy aquí, de vuelta al infierno. Ahora solo espero escuchar vuestros aplausos, ignorantes vosotros. Nada importa tanto como cortar las alas al diablo, calladito está más guapo.

   Estoy aquí, haciendo de ésto lo que es. Pero no me voy a callar, ha llegado el diablo vestido de princesa. Una semana que me ha valido de por vida para callar lo que pude explotar. Éste es mi infierno, aquí mando yo.

   Escribir siempre será el grito que le susurre al silencio y vuestra ignorancia el mayor insulto, el fallo que romperá toda vuestra verdad.

   Escribir siempre será lo último que me quede, lo único que me quede. Mientras tenga una palabra que gritar la susurraré al silencio de no ser escuchada.



FALSO SONETO AL DESALIENTO   

Veo un año que empieza igual que acaba, con la misma mentira seguida de las mismas escusas.
Veo mis sueños cumplidos por otros que no valoran el latido de mi corazón.
Veo mis lágrimas pedir un auxilio sordo que sólo escucha mi almohada.
Veo mis palabras construir mentiras una y otra vez.

Cierro las puertas a las palabras de compasión sordas a explicaciones inútiles.
Cierro los ojos a actos inocentes que dañan mi pobre corazón cansado.
Cierro la temporada con más dolor si cabe y menos falsa comprensión.
Cierro la boca para no hacer más daño, para no hacerme más bien.

Abro mi mente a mentiras cobardes que hacen que pueda seguir caminando.
Abro mi corazón a desconocidos que escriben mi futuro incierto.
Abro mi ser al dolor para hacerlo mi amigo, porque él nunca me abandona.



            ¿QUÉ LES PASA A MIS LUNES?
Qué les pasa a mis lunes que ya no escriben para ti.
Qué les pasa a mis lunes que ya no brillan para mí.
Qué les pasa a mis lunes que ya no viven sin mentir.
Qué les pasa a mis lunes que ya no construyen el fin.

Qué les pasa a mis lunes que no son domingos ni ayudan al puto martes.
Qué les pasa a mis lunes que no trabajan pensamientos no destruyen más recuerdos.
Qué les pasa a mis lunes que no son de nadie ni nadie quiere ser mi lunes.
Qué les pasa a mis lunes que se escriben solos aunque cierre mis ojos.



MARTES, COMO YA DIJO ALGUIEN
Martes que caminas indeciso buscando un viernes maldito.
Martes que construyes promesas que saben a cerveza.
Martes que suenas a mentira y que olvidas mis recuerdos.
Martes de mi camisa a cuadros y de vaqueros rasgados.
Martes que no eres día ni eres noche, ni eres nada en mis manos.
Martes que martirizas mis horas en busca de un miércoles que recuerda a lunes.
Martes de frío y marujas en las plazas del pueblo.
Martes que como ya dijo alguien, de mierda te hartes.



LOS MIERCOLES SON UN MONTÓN DE PALABRAS DICHAS POR OTROS.
Los miércoles están colgados en el trapecio de los cinco días, pero eso ya lo dijo Amaral.
Los miércoles son para tocar la guitarra que era para mí tu cuero, pero eso y a lo dijo Estopa.
Los miércoles son para que me pongas la mano aquí, Macorina; pero eso ya lo dijo Chavela Vargas.

Los miércoles son para para que se me alegre el día al ver al sol secándose en tu ventana tus bragas, pero eso ya lo dijo Extremoduro.
Los miércoles son semanas rotas en dos, pero eso ya lo dijo Pereza.
Los miércoles son para morirme contigo si te matas, pero eso ya lo dijo Sabina.

Los miércoles son un montón de palabras dichas por otros.
Los miércoles son dolor de cabeza después de un martes de cebada.
Los miércoles son más largos y más dolorosos que cualquier jueves.



LOS JUEVES QUE SABEN, SUEÑAN Y RECUERDAN
Los jueves sueñan con un viernes de fiesta y se visten de estudiantes borrachos.
Los jueves sueñan con que termine la semana, porque se les hace larga, porque nunca acaba.
Los jueves sueñan con otros jueves en que mi mirada salía sólo en busca de tus caderas.
Los jueves sueñan con horas de alegría entre horas de trabajos forzados.

Los jueves saben que el fin está cercano y lloran la distancia con el sábado.
Los jueves saben que siempre están en medio y parecen ausentes en todo el calendario.
Los jueves saben que ya no te tengo y gritan tu nombre a fuerza de silencios.
Los jueves saben que son necesarios para hacer más importante el miércoles de ayer.

Los jueves me recuerdan al día en qué nací, me recuerdan que fui estudiante, me recuerdan al vagón rosa de un trenecito en mi pared de parvularios.




LOS VIERNES DEPENDEN
Los viernes dependen de la luz del jueves,
pueden ser tranquilos o aburridos pero siempre deseados y esperados.

Los viernes dependen de los viernes pasados,
donde me miraba en ojos oscuros que siempre fueron infinitamente más fuertes que mis ojos claros.

Los viernes dependen de la intensidad de la semana,
cuando da pena dejar la rutina pero alegra el encuentro con manos amigas.

Los viernes dependen del juego de la vida,
que nos arrincona en mentiras y nos arranca sonrisas a la fuerza.

Los viernes dependen del sábado,
porque son la antesala de la alegría, porque rompen la semana, porque le dan el sentido.




SÁBADO, ¡QUÉ IRONÍA!
Sábado de paseos de la mano, besos enredados.
Sábado entre butacas vacías en el cine de la esquina.
Sábado subiendo al escenario del teatro de la vida.
Sábado soleado haga frío o caiga un rayo.
Sábado de tus silencios, de mis gritos ahogados.
Sábados de mis mentiras de tus verdades a medias.
Sábados de soledades y compañías bien avenidas.
Sábados que por si solos hacen toda una vida.
Sábado, ¡qué alegría! Has venido a traerme una sonrisa.
Sábado, ¡qué tontería! Tan fácil como mentirle al martes. 
Sábado, ¡qué ironía! Me subo al escenario, ocupo tu butaca vacía, le doy la mano a la soledad de la otra mitad de tu verdad.




TE ABANDONO LOS DOMINGOS POR EL FÚTBOL
La felicidad de mis domingos está en las manos de once tíos que a veces no saben dármela; pero aún así no desespero y al siguiente domingo vuelvo.
Te abandono los domingos por el fútbol porque aunque me las de del mejor equipo del mundo mi corazón es amarillo.
La felicidad de mis domingos está medida a razón de a qué hora terminara el sábado;  el domingo puede ser una siesta o un paseo por el fin del mundo.
Te abandono los domingos por el fútbol porque no hay siesta que haga latir mi corazón amarillo.
La felicidad de los domingos está guardada en el secreto del equilibrio; porque puedes ser cinéfilo y teatrero, pirata más que banquero, probador de colchones, torero.
Te abandono los domingos por el fútbol porque sólo un escenario compite para hacer latir mi corazón amarillo.
Te abandono.



DESPUES DE UNA SEMANA LLENA DE PALABRAS

Después de una semana llena de palabras que llenaban tu silencio de mentiras.

Después de que mis lunes no sean de nadie ni nadie quiera ser mi lunes.
Después de un martes que no es día ni noche, ni nada en mis manos.

Después todo son palabras que llenan vacíos, todo son historias que ya están contadas.

Después de un miércoles con un montón de de palabras dichas por otros.
Después de un jueves que siempre está en medio, un jueves ausente en el calendario.

Después todo son palabras y mentiras aburridas para llenar las lineas de una libreta que ya está escrita.

Después de un viernes tranquilo y aburrido, deseado y esperado.
Después de un sábado subiendo al escenario del teatro de la vida.

Después de todo aquí me encuentro, llena de palabras vacías; obligada a seguir construyendo tu vida.

Después de un domingo amarillo donde once tíos no supieron darme la felicidad.

Después de una semana llena de palabras mi celebro se llena de silencios,
mis manos se llenan de mentiras,
mis ojos se llenan de vacío,
mis libretas se llenan de historias a medias.




LA CIUDAD

La ciudad ruge con su tracatracatrá de moto picos buscando el euro de la alcaldesa.
La ciudad llora con su tracatracatrá de silencios rotos por una calle mal puesta. 
La ciudad grita su tracatracatrá de imperfectos baldosines en la acera.
La ciudad calla con su tracatracatrá de moto picos levantando los deshechos de lo que antes fueron tus pasos sobre ella.
Puedo perderme entre la gente o buscarme entre cervezas y bares. 
Puedo encontrarme bebiendo con Chavela o esconderme tras cuadros de artistas desconocidos.
Puedo olvidarme en conversaciones ajenas o dar la espalda al fútbol con un buen libro.
Puedo y no puedo perderme, puedo y no puedo olvidarme.
Puedo y no puedo esconderme, puedo y no puedo buscarme.
Puedo y no puedo encontrarme. 
Puedo, y siempre puedo, ser feliz.



LA PEQUEÑA CHISPA

Eras un terremoto terrible y escurridizo.
Eras un mis deseos y pasiones concentrados en un cuerpo tan pequeño.
Eras fiel, demasiado fiel.
Eras una mirada que me desnudaba.
Eras la pequeña chispa que encendía mi mente más primitiva.
Eras fiel, demasiado fiel.
Eras un secreto gritado a la noche.
Eras un desliz a conciencia en mi boca deseosa de más noches y más deslices.
¿Eras fiel? Si, demasiado fiel.



A VECES

A veces escribo
Y a veces escribo demasiado
A veces entiendo 
Y a veces entiendo demasiado
A veces te miro
Y a veces miro para otro lado
A veces pienso
Y esas veces ya no existo
A veces me escondo
Y a veces corro por tu lado
A veces me río
Y a veces me río con más ganas
A veces me mojo
Y a veces es tu corazón el empapado
A veces escribo 
Y a veces escribo demasiado



VAMOS CAMINANDO

Vamos caminando solos por un camino triste y frío.
Vamos sumando canciones a la lista de recuerdos malditos.
Vamos susurrando gritos sordos a oídos cansados de escuchar.
Vamos pidiendo ayuda inútil a brazos que ya han olvidado cómo abrazar.

Vamos perdiendo la paciencia a cada fallo,
 en cada llanto ahogado.

Pero nunca nos rendimos cuando se trata de volver a tropezar.
Pero nunca nos rendimos cuando se trata de jugar a desafinar.
Pero nunca callamos cuando es otro el que tiene la oportunidad de joder.
Pero nunca abrazamos aún sabiendo que esas manos nunca van a doler.

Pero nunca apuntamos el camino de regreso,
volver a empezar siempre es una opción.

Vamos escribiendo citas inútiles en el diario más antiguo
pudiendo grabar a fuego nuestro llanto en el infierno.
Vamos olvidando los recuerdos duros en el cajón más oscuro
pudiendo ser nuestra arma más dañina, el tiempo me enseñó que ésto siempre funciona.

Voy ocultándome en palabras,
intentando que le funcione a otros que jamás me leerán
pudiendo abrir mis ventanas
y gritar hasta dejar sorda a la humanidad.



VOY A BUSCAR OTRAS MENTIRAS

Voy a buscar la luz que sé que vive en la oscuridad,
voy a dibujar tus sonrisas como metáforas de mis lágrimas,
voy a pedir tiempo muerto dentro del tiempo muerto en el que vivo,
voy a hablar conmigo cuando ni yo se lo que yo me digo.
Miraré más lejos sin miedo a ver lo que tengo cerca.
Escupiré muy cerca segura de que me vendrá de vuelta.
Correré sin prisa sabiendo que no pasaré de la esquina.
Voy a buscar palabras que no suenen gastadas,
voy a juntar los colores que creen nuevos arcoiris,
voy a perder la cabeza donde no se encuentre al corazón,
voy a escribir mentiras para no perder la razón.
Mentiré, que le voy a hacer; nadie lo hace mejor.
Olvidaré para recordar nuevas historias que ya inventé.
Recordaré para olvidar las historias por las que un día lloré.
Voy a buscar la droga de tu mirada para quitarme después,
voy a tirar de la manta para ver tu espalda otra vez,
voy a dejar escritas mis mentiras para ver las verdades crecer,
voy a inventar palabras nuevas para no dejar de mentir.
Escribiré dormida cuando no tenga más que decir.
Gritaré verdades cuando nadie crea a mi voz.
Escucharé idioteces y olvidaré problemas.
Gritaré verdades cuando nadie escuche mi voz. 



MADRID

Con el tiempo agotado en Goya espera mi galán; un abrazo que tanto he esperado, ese abrazo que tanto he necesitado. La madriguera aguardaba mi mochila llena de alegría y ropa que nunca necesité. Vinito a medio día y ventanas con vistas al silencio.
     Por la calle de Alcalá la Soraya viene y va.

Teatro y paseo, caminado sin destino. Príncipe Vergara, Retiro, Cibeles y Sol. La Latina nos espera al otro lado de la Plaza Mayor. Los dos perdemos la cabeza cuando una rubia nos pregunta si queremos comer.
     Y por La Latina la Soraya viene y va.

Apurando la alegría, aguardando tu llegada nerviosa como ayer. Bebiendo el elixir de la vida, aguardando la llegada de la mejor compañía de mi Soledad. Metro a Tribunal; Malasaña nos ofrece sus rincones más oscuros. Nos vemos en la Vía Láctea[1], cuidado con confundir baño con cocina bandida. Poco a poco se nos van cerrando los locales.
     Y por Malasaña la Soraya viene y va.

Nos vemos en Sol que ha salido a secar la lluvia de ayer buscando el bocadillo que no llegará. Cuenca nos espera para darnos de comer, el pañuelo del mundo nos arropa. Señoritas en Gran Vía, despedidas. Fuencarral y Hortaleza, gofres que no quedan. Pierde el Rayo empata el Madrid.
    Y por la Calle del Carmen la Soraya viene y va.

Doscientas mil personas nos arropan, Sol-Atocha-GranVía andando hasta Tribunal. Paseos y esperas, cervezas sin pagar. Vamos perdiendo compañías, aun quedan bares sin cerrar. Gané al futbolín en tu campo, bailé sin saber lo que hacía.
    Y en Chueca la Soraya viene y va.

Ultima noche, ultimas horas; vuelvo a la vida cuando me tocas, nace una estrella nueva en Atocha[2]. Cafés y gorriones cebados. Yo que presumo de mi libertad al caminar todo es más bonito si lo hago de tu mano.
    Y en Atocha la Soraya viene y va.

Desmontemos la madriguera, despidamos a mi galán. Crucemos mi Madrid, vamos a despedir la felicidad. Nos esperan para comer el último manjar, reímos esperando que alguien pisara la bomba de la razón. Ya he perdido la cabeza; no me quiero marchar.
    Desde Cuatro Caminos la Soraya se va.

La ciudad se aleja tras de mí, despedidas en el asiento trasero de un coche. Volveré para quedarme. Yo me bajo en Atocha, yo me quedo en Madrid[3].
    Por la calle de Alcalá la Soraya viene y va.

[1] Fragmento de la canción "Es sólo una canción" de Amaral
 [2] Fragmento de la canción "Madrid" de Pereza
 [3] Fragmento de la Canción "Yo me bajo en Atocha" de Joaquín Sabina. 



CANCIÓN DE ASCO Y MIERDA

Mi enfermedad está enferma
Mi garganta aguanta una arcada
Mis mucosas no quieren respirar
Mi cabeza no sabe pensar.
Mi enfermedad está enferma
Mi fiebre empieza a delirar
Una canción de asco y mierda
Para felicitar la navidad.



TRECE
Enero esperado: Yo, que nunca creí ni en la suerte ni en la desgracia, me descubro maldiciendo mi desdicha del despiste del desastre del tiempo que se nos pasa.

     Febrero del alma: Yo, que siempre te he amado, y a tu frío y tu vino y tus gritos; me descubro en la oscuridad del silencio.
   
     Marzo de paso: Yo, que he confiado en mis palabras y mi forma de ordenarlas, he buscado mi sentido en canciones totalmente ajenas.

     Abril de colores: Yo, que siempre he caminado al borde de la primavera con miedo, me descubro con ganas de, por dios,que pase el tiempo.

     Mayo de mierda: Yo, que he odiado este maldito mes y aprendí a amarlo por ella, de nuevo espero que una gran hoguera se encienda entre Abril y Junio.

     Junio de luz y sombras: Yo, que nunca he podido resistir el fuego de éste sol que calienta, soy la que enciende el astro con un mechero que me quema los dedos.

     Julio de fuego: Yo, que vivo en la oscura noche huyendo del día y sus verdades, alguna mañana me he dejado ver entre pequeñas mentiras.

     Agosto mío: Yo, aquí en mi día: mentí, grité, odié y reí, también lloré. Pero nunca llegué a ser feliz.

     Septiembre temido:Yo, que siempre disfruté de volver a empezar, sentí que volví a morir, a volver al pozo donde me encontraba antes del sol.

     Octubre gris: Yo, que siempre presumí de mi adaptación, me vi hundida y en silencio construyendo mentiras piedra a piedra.

     Noviembre de volver a nacer: Yo, que nunca quise aceptarlo, empecé a levantar el vuelo y a ver más lejos, a reírme de aquello y a jugar con esto.

     Diciembre final: Yo, que siempre he vacilado de mi salud de hierro, acabo un año de mierda con una salud de mierda.

   
He sobrevivido al silencio y gritado al frío insuficiente.
He visto aquelarres varios, en algunos hasta he participado.
He creído que había soluciones y me he perdido buscando la última página.
He reído sin razón y llorado con ella.
He llorado sin razón y reído con ella.
He probado de mi propia cosecha pepinos y melones; pero sigo sin poder elegir.
Sigo sin aguantar el calor y me hielo en Julios solitarios.
He muerto de risa y resucité porque no tenía ni puta gracia.
He escrito mil poemas y ninguno rima como lo hacía antes de ayer.
He visto mil miserias y ninguna rima como mi tristeza.
He mentido por tus piernas y vuelvo a mentir por nombrarlas.
Me he ahogado en un pozo y he gozado en rincones ajenos.
He contado trece gilipolleces y las volvería a contar trece veces.






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